DIABLOROSSO
Santa Ana, Ciudad de Panamá
Design Team
Johann Wolfschoon
Collaborators
Carlos Chen
Juan Carlos Barrios
Daniela Manfredi
Luis Muñoz
Anthony Flores
Client
Diablo Rosso
Area
150 m² (1,614 ft²)
Year
2017
Photography
Fernando Alda
Raphael Salazar
Johann Wolfschoon
Collaborators
Carlos Chen
Juan Carlos Barrios
Daniela Manfredi
Luis Muñoz
Anthony Flores
Client
Diablo Rosso
Area
150 m² (1,614 ft²)
Year
2017
Photography
Fernando Alda
Raphael Salazar
Diablo Rosso is a creative think tank and art gallery established in 2006 and based in Panama City. Since its birth, SKETCH and Diablo Rosso have worked together in the design of spaces that foster critical thinking towards arts, politics, and culture. The gallery has recently relocated to the ground floor of a landmark commercial building dating from the 1930s; recognized for formerly being one of the largest department stores in the city and due to its prime location across Santa Ana square, a meeting point for the community and heart of the Santa Ana neighborhood. Today this busy commercial street is a bustling pedestrian avenue crowded with street vendors and loud music; a one of a kind scenario that boosts the gallery’s main driver: encourage the public’s appreciation for contemporary art through the generation of impact in the surrounding community.
The design team at SKETCH has been involved from the start of the creative process, starting with the selection of the space and being involved with some of the preservation and restoration works on a few architectural components that remain intact, such as an original terrazzo floor that was discovered in a part of the gallery and the restoration of the original façade openings. The project also seek to respectfully integrate the gallery program within the historic building, highlight the sense of place in order to benefit Diablo Rosso’s cultural agenda while creating a space that allows the appreciation of the exhibited art pieces as well as the historic and architectural value of the building.
This project aims to part away from the traditional white cube gallery, creating one that is actively engaged with its surroundings. Through the restoration of the building’s original facade, full height glazing allows daylight to flood the gallery space and, viceversa, lets its contents to be viewed from the square across the street. At night, the gallery lights up the sidewalk - presenting its current program to anybody that walks by; proposing new interactions, encounters, ideas and discussions within the neighborhood. This intervention lends itself to the city as a lamp by night and as a window by day —showing itinerant exhibitions throughout the year— appealing to the curiosity and to the senses of the passerby.
The design team at SKETCH has been involved from the start of the creative process, starting with the selection of the space and being involved with some of the preservation and restoration works on a few architectural components that remain intact, such as an original terrazzo floor that was discovered in a part of the gallery and the restoration of the original façade openings. The project also seek to respectfully integrate the gallery program within the historic building, highlight the sense of place in order to benefit Diablo Rosso’s cultural agenda while creating a space that allows the appreciation of the exhibited art pieces as well as the historic and architectural value of the building.
This project aims to part away from the traditional white cube gallery, creating one that is actively engaged with its surroundings. Through the restoration of the building’s original facade, full height glazing allows daylight to flood the gallery space and, viceversa, lets its contents to be viewed from the square across the street. At night, the gallery lights up the sidewalk - presenting its current program to anybody that walks by; proposing new interactions, encounters, ideas and discussions within the neighborhood. This intervention lends itself to the city as a lamp by night and as a window by day —showing itinerant exhibitions throughout the year— appealing to the curiosity and to the senses of the passerby.
Diablo Rosso es una plataforma creativa y galería de arte fundada en 2006 en Ciudad de Panamá. Desde su origen, SKETCH y Diablo Rosso han trabajado juntos en el diseño de espacios de exhibición que incentiven el pensamiento crítico hacia las artes, política y cultura. La galería se ha reubicado recientemente en la planta baja de un edificio comercial que data de los años 30, reconocido por ser una de las tiendas por departamento más grandes y lujosas de la época y por su posición privilegiada frente a la Plaza de Santa Ana, un punto de encuentro para la comunidad en el corazón del histórico barrio de Santa Ana. Hoy esta calle comercial es una vibrante avenida peatonal repleta de vendedores ambulantes y música popular; un escenario único que potencia la principal meta de la galería: incentivar la apreciación pública del contemporáneo, a través su presencia en la comunidad y su contexto.
El proyecto busca despegarse de la tradicional galería dentro del cubo blanco y crear una que se relacione con su contexto inmediato. A través de la restauración de la fachada de vidrio original del edificio, la luz natural entra al espacio de galería y viceversa, permitiendo que su contenido sea visto desde la plaza al otro lado de la calle. De noche, la galería ilumina la acera y presenta el arte a los peatones, proponiendo nuevas interacciones, encuentros e ideas dentro de la comunidad. Esta intervención se presenta como una lámpara de noche y como una ventana de día, mostrando exhibiciones que itineran a lo largo del año y apelando a la curiosidad del visitante.
La distribución interior se ha organizado siguiendo estos mismos parámetros. El escritorio de información se ha ubicado en el centro de la galería, pero fuera de vista para ser menos intimidante a los peatones y visitantes. En este espacio también se ubica un depósito climatizado, servicio sanitario y cuarto mecánico; al lado de una segunda sala de exhibición que también funciona como sala de proyecciones.
El proyecto busca despegarse de la tradicional galería dentro del cubo blanco y crear una que se relacione con su contexto inmediato. A través de la restauración de la fachada de vidrio original del edificio, la luz natural entra al espacio de galería y viceversa, permitiendo que su contenido sea visto desde la plaza al otro lado de la calle. De noche, la galería ilumina la acera y presenta el arte a los peatones, proponiendo nuevas interacciones, encuentros e ideas dentro de la comunidad. Esta intervención se presenta como una lámpara de noche y como una ventana de día, mostrando exhibiciones que itineran a lo largo del año y apelando a la curiosidad del visitante.
La distribución interior se ha organizado siguiendo estos mismos parámetros. El escritorio de información se ha ubicado en el centro de la galería, pero fuera de vista para ser menos intimidante a los peatones y visitantes. En este espacio también se ubica un depósito climatizado, servicio sanitario y cuarto mecánico; al lado de una segunda sala de exhibición que también funciona como sala de proyecciones.